EL LIBRO
DEL INGENIERO KUROIWA ESTÁ HECHO PARA SALVAR VIDAS.
El libro Gestión del riesgo de desastres en el
siglo XXI es una de las obras más importantes en el campo de la investigación
publicadas en los últimos años; es el resultado del vasto trabajo de
divulgación del renombrado ingeniero y sismólogo Julio Kuroiwa, fallecido
recientemente.
La obra de 500 páginas, publicada por Editora Perú,
fue presentada en la Feria Internacional del Libro de Lima con la asistencia
del presidente de la República, Martín Vizcarra, quien fue alumno de Kuroiwa; y
la participación de Julio Kuroiwa Zevallos, hijo del especialista.
El texto es producto de toda una vida profesional
dedicada a la sismología. En sus páginas, el autor presenta un trabajo de
investigación de larga data, el cual estuvo centrado en encontrar las formas
más eficientes para prevenir las consecuencias de un movimiento telúrico u otro
desastre natural.
Kuroiwa siempre mostró preocupación por la carencia
de medidas de prevención ante las amenazas de desastres en el Perú, cuyo
territorio atraviesa diversos pisos ecológicos y está amenazado por el
calentamiento global.
Por ello, en su libro el autor nos urge a ser
conscientes de que nuestro territorio está ubicado en el Cinturón de Fuego del
Pacífico, zona sísmica de la cuenca del Pacífico donde los movimientos telúricos
son normales desde hace millones de años.
Desafortunadamente, nuestra historia nos ha
enseñado con amargura que la falta de preparación, la improvisación, el
conformismo y la inercia han costado la vida a miles de seres humanos cuando
hemos sufrido sismos de gran magnitud.
Por ello, por medio de su obra, Kuroiwa nos exhorta
a aprender de las lecciones del pasado para enfrentar con mejor preparación
cualquier terremoto o desastre natural. Con ese propósito, se empeñó en el
trabajo de recopilar 175 mapas de peligro múltiple elaborados entre 1998 y el
2016.
En una reciente entrevista concedida meses antes de
su fallecimiento, insistía en aconsejar al país acerca de cómo enfrentar un
sismo. “Uno entra en pánico porque no sabe qué hacer. Si hay un plan, hay un
doble efecto: salvo la vida y no entro en pánico”.
Una de sus recomendaciones para prevenir las
consecuencias de los desastres naturales es la activa participación de la
población en los simulacros, los cuales deben ser organizados por las autoridades
nacionales, regionales o locales.
Al respecto, él manifestaba que los ensayos se
abordaran de manera seria y responsable y nos recordaba el ejemplo de Japón,
cuya población se distingue por su preparación y calmada reacción cuando es
sorprendida por alguno de los fortísimos movimientos telúricos que cada cierto
tiempo se producen.
Igualmente, sostenía que lo más útil para enfrentar
un sismo es la información. Por ello, su libro contiene gráficos y fotografías
sobre las zonas de riesgo y recomendaciones técnicas sobre las construcciones
para evitar la informalidad en las construcciones sin criterios técnicos.
El libro del ingeniero Kuroiwa está hecho para
salvar vidas, por lo que el Perú le debe una gratitud infinita por su
invalorable aporte a la cultura de la prevención de desastres.